La ofrenda musical
Para chulo, yo…
Protagonistas del evento:- Federico II de Prusia (F2P): déspota ilustrado, promotor de las ciencias y las artes, flautista competente y compositor aficionado (vamos, como los reyes de hoy).
- Johann Sebastian Bach (JSB): multi-músico (compositor, organista, clavecinista, violinista, violista, maestro de capilla y kantor alemán), ferviente luterano y prolífico progenitor (20 hijos).
- Carl Philipp Emanuel Bach (CPEB): uno de los 20 descendientes del arriba mencionado, adalid del período clásico y el estilo galante.
Localización del evento: El palacio de Sansoucci en Postdam, una de las sedes del rey y un verdadero museo de instrumentos musicales.
Los antecedentes:
- CPEB trabaja de clavecinista contratado por F2B.
- F2B se ha gastado una pasta en una colección de pianofortes.
- JSB hace una paternal visita a su hijo CPEB
- F2B se entera de la visita de JSB y se propone tenderle una trampa para ver si realmente es tan buen músico.
La historia:
F2B recibe a JSB y le pide que pruebe sus pianofortes (que, por cierto, no fueron muy del agrado del compositor), aunque en realidad es una excusa para, delante de todos los invitados, retarle a poner a prueba sus capacidades de improvisación e interpretación. JSB, que era de natural chulito, no pudo dejar de aceptar el reto y además le pidió al rey que le ofreciese un tema nuevo para improvisar una fuga. El salado de F2B ya debía tener la trampa preparada de antemano, pues allí mismo le ofreció un tema musical. El susodicho tema (llamado el Thema Regium) tenía, por decirlo finamente, bastante mala leche, ya que está lleno de cromatismos.
El Tema Regio |
Cualquier otro hubiese hecho el ridículo más espantoso. Pero aquí tenemos a nuestro entrañable JSB cogiendo el toro por los cuernos e improvisando una fuga a 3 voces (ricercare a 3) en ese mismo momento (ad hoc e in situ, por seguir con los latinismos).
F2B, y el resto de los presentes se quedaron a cuadros, y más todavía cuando 2 semanas más tarde JSB le entregó al rey una completa colección de fugas, cánones y variaciones sobre el tema que suman cerca de una hora de música, y que conocemos como la Ofrenda Musical.
La maravilla que consigue Bach es estrujar de todas las maneras posibles ese extraño tema de apenas 8 compases y crear una colección de piezas que lo exploran de todas las maneras posibles. Además de las fugas y cánones, perfectamente hilvanados, JSB incluye “enigmas musicales”: el compositor se se limita a marcar para cada voz la clave y la melodía, pero no los momentos en que cada uno de ellas tienen que entrar. Con el lema “buscad y hallaréis” que aparece en el título del canon, anima a los músicos a encontrar la solución por su cuenta. La gracia es que estos enigmas pueden resolverse de diversas maneras, por lo que las interpretaciones de la ofrenda musical pueden ser muy distintas (aunque normalmente los músicos suelen utilizar soluciones ya creadas por otros). JSB, además de divertirse y ponerse a prueba, se permitió pagar lanzar una indirecta al rey como respuesta a tener que improvisar sobre un tema tan complicado. Y es que JSB pensaría… para chulo, yo…
Oír la composición completa de un tirón puede ser un poco pesado, ya que es una música compleja y que demanda mucha atención. Pero os recomiendo escuchar la primera pieza (ricercar a 3) que fue la improvisación original sobre el tema regio (el cual se puede oír al principio). En la red hay cientos de estupendas versiones, pero yo os voy a enlazar esta por lo curioso de la animación en la que pueden verse claramente las diferentes voces, las entradas y las relaciones armónicas.